Vandalia & Ars Atlántica - Góngora y la Música (2023)

  • 02 Dec, 03:52
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Artist:
Title: Góngora y la Música
Year Of Release: 2023
Label: Lindoro
Genre: Classical
Quality: flac lossless (tracks)
Total Time: 02:18:37
Total Size: 618 mb
WebSite:

Tracklist

01. Ansares y Menga
02. Las redes al sol tendidas
03. A toda ley, madre mia
04. Al tronco de un verde mirto
05. Sobre las altas rocas
06. Diferencias de la Carabanda
07. No vayas, Gil, al sotillo
08. Ciego que apuntas y aciertas
09. Segun vuelan por el agua
10. Tenga yo salud
11. Ya no soy quien ser solia
12. Urnas plebeyas
13. Cura que en la vecindad
14. Sin Leda y sin esperanza
15. Caracoles me pide la nina
16. Las redes sobre la arena
17. La mas lucida belleza
18. Guarda corderos, zagala
19. Danza llamada El rastreado
20. ?A que nos convidas, Bras
21. En el baile del egido
22. En dos lucientes estrellas
23. Servia en Oran al rey
24. Espanoletas
25. La mas linda nina
26. Barquilla pobre de remos
27. Mientras por competir con tu cabello
28. Esperando estan la rosa
29. No son todos ruisenores
30. Ay, que me muero de celos
31. En los pinares de Jucar
32. En la beldad de Jacinta
33. Yedra vividora
34. Ojos eran fugitivos
35. Desbaratados los cuernos
36. De las faldas del Atlante
37. Gallarda por la E
38. Pasacalles
39. Jacara por la E

urante el antiguo régimen, la posibilidad de recibir lo que entonces se entendía por una educación completa estaba generalmente reservada a los vástagos de las familias acomodadas. En el caso de Luis de Góngora y Argote, nacido en Córdoba el 11 de julio de 1561, también fue decisiva la herencia cultural de su padre, Francisco de Argote, quien era licenciado por la universidad de Salamanca y poseía una importante biblioteca. Don Francisco había quedado relegado, siendo niño, de la herencia de un rico mayorazgo, pero había gozado de los favores del secretario real don Francisco de Eraso, quien le dio, entre otros cargos, el de juez de bienes confiscados del Santo Oficio. Por otra parte, su madre, Leonor de Góngora, pertenecía a la nobleza local al igual que su tío Francisco, racionero de la catedral. Gracias a estas favorables circunstancias materiales y culturales, el joven Luis pudo estudiar cánones en la Universidad de Salamanca acompañado de un ayo que la familia puso a su disposición tras recibir las órdenes menores en 1575. No hay muchos datos de su vida de estudiante, pero cuando finalizó su estancia en Salamanca hacia 1580 ya se había ganado cierta fama como poeta. A su regreso a Córdoba fue nombrado canónigo beneficiado de la catedral por legado de su tío don Francisco. A pesar de alguna que otra censura del obispo, pudo compatibilizar sus cargos en el cabildo con sus actividades profanas y la composición poética, realizando además numerosos viajes comisionados por el cabildo que le dieron la oportunidad de dar a conocer sus obras en varias ciudades importantes de la Península, como Granada, Jaén, Toledo, Madrid, Salamanca o Valladolid. A partir de 1610 se acentúan en su poesía los hipérbatos, los cultismos y las metáforas difíciles por encima de los temas ligeros que prevalecieron en la primera etapa de su producción, y esto le hizo ganar una gran legión de seguidores entre los llamados poetas culteranos, como fray Hortensio Félix Paravicino, el conde de Villamediana, Pedro Soto de Rojas, o Anastasio Pantaleón de Ribera, entre otros, merced, sobre todo, a la fascinación que generó su obra más ambiciosa, las incompletas Soledades que divulgó en la Corte en 1613.
La aceptación de su poesía no fue unánime, pues sufrió el rechazo de poetas conceptistas como Francisco de Quevedo y clasicistas como Lope de Vega y los hermanos Argensola. En 1617, debido a su creciente prestigio y reputación, fue nombrado capellán real de Felipe III, para lo cual tuvo que ordenarse sacerdote y trasladarse a Madrid. Incapaz de sustraerse a los hábitos corruptos de su época, dilapidó su fortuna en conseguir cargos y prebendas para sus familiares. En 1627, enfermo y arruinado, regresó a su ciudad natal donde falleció el 23 de mayo de una apoplejía. Sus restos se encuentran en la mezquita-catedral de Córdoba.